convivo con 3 animales sénior:
Mis dos perros de 14 y 10 años, junto a mi gata de 11 años.
Ellos me han enseñado la importancia de conocer los pequeños detalles de esta etapa.
Los miedos e inseguridades que aparecen, el deambular por las noches, el exceso de calor que tienen…
Y cuando aparece la disfunción cognitiva, la incontinencia…
Incluso los paseos son distintos, los tiempos son otros.
Lo que siempre hacíais juntos ya no se puede y hay que estar adaptando la vida a lo que necesitan.