Llevo ya 10 años dedicándome en exclusiva a la nutrición veterinaria, y como es de esperar, he trabajado con diferentes patologías.

La más bonita, es el cáncer. También es muy dura, ojo.

Digo bonita porque en mis casos han salido con unos resultados espectaculares que hasta el oncólogo que llevaba el caso se ha quedado maravillado.
Y el acompañamiento a las familias es un proceso que hace que se te erice la piel.

Y es que la nutrición, si damos pienso, no acompaña a que el proceso sea satisfactorio. Pero la nutrición natural nos da unos resultados espectaculares.

También el apoyo del ayuno es muy importante. La dieta cetogénica en el ámbito veterinario todavía no se utiliza tanto como en humanos pero tu, vas a aprender a aplicarla.

Y además, la fitoterapia me apasiona, así que damos apoyo para evitar síntomas digestivos y mejorar el sistema inmune.